ANKARA.- El Parlamento de Turquía aprobó hoy en una sesión extraordinaria el nuevo código penal, en el que no se castiga con la cárcel el adulterio.
La nueva legislación, que fue debatida durante dos semanas, fue aceptada con la votación del gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD) y los partidos de la oposición.
La ratificación del nuevo código, que suprime uno que estaba vigente desde hace 78 años y que regirá a partir de abril próximo, es considerada en medios judiciales como de carácter moderno.
Según medios diplomáticos, la no inclusión de la pena de cárcel por cometer adulterio -posibilidad con la que especuló el PJD, de orientación integrista islámica moderada- es una concesión a la Unión Europea (UE).
Bruselas había advertido que la inclusión del adulterio como delito podría entorpecer la entrada de Turquía en la UE.
En ese sentido, la aprobación de la nueva legislación se produce después que el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, mantuviera en Bruselas y a principios de semana sendos encuentros con el comisario de la ampliación de la UE, Gunther Verheugen, y el entonces presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi.
Tras entrevistarse con Erdogan, tanto Verheusen como Prodi señalaron entonces que si el nuevo código penal aprobado por la Cámara turca no incluía el adulterio como delito castigado con la cárcel, no habría obstáculos para reiniciar las conversaciones de la incorporación turca a la UE.
La incertidumbre sobre las intenciones ultimas del partido gobernante turco se mantuvo no obstante hasta el ultimo momento después de que el Gobierno de Ankara anunciara que posponía hasta octubre próximo el envío la Parlamento de la nueva legislación penal, sin precisar sí en él se incluiría el adulterio como delito.
La decisión causó sorpresa en los medios de prensa, que se preguntaban sobre la posibilidad de que el ejecutivo de Erdogan tratara de ganar tiempo para desbrozar antes el camino de la incorporación del país a la UE.
"Somos turcos, y ellos (los representantes de la UE) no pueden intervenir en los asuntos domésticos de Turquía. Hemos cumplido todos los criterios políticos para empezar las negociaciones sobre la incorporación en la UE. La aplicación de reformas pueden tardar tiempo", llegó a advertir Erdogan.
La controversia surgió después de que en los debates previos a la nueva propuesta de código penal el partido del primer ministro recomendara unilateralmente que el adulterio fuera incluido como un delito, lo que causó amplias protestas en organizaciones civiles.
Según los observadores, la hasta hoy ambigua postura del PJD podría deberse a la presión de los sectores mas extremistas del partido, que habrían pugnado por incluir el adulterio como delito en el nuevo cogido penal, en contra de la opinión de las facciones más moderadas, lideradas por el propio Erdogan.
De acuerdo con ese mismo análisis, con la aprobación del nuevo cogido penal Turquía da un paso de gigante para convertirse en el primer país de mayoritariamente musulmán que forma parte de la UE, un objetivo que comparten la inmensa mayoría de los partidos políticos turcos, a excepción de los sectores más radicales.
