LA HABANA.— Cuba incautó desde enero de 2003 más de siete toneladas de drogas, desarticuló 18 planes de tráfico internacional y detuvo media docena de naves involucradas en los intentos de contrabando, según informaron fuentes oficiales.
Un reporte del Ministerio del Interior, publicado por el periódico oficial Granma, dio a conocer los resultados del operativo llamado "Coraza Popular", una campaña tanto policial como vecinal para terminar con el incipiente mercado ilegal de estupefacientes.
Hasta ese momento, Cuba rechazaba tener un problema de drogas en su territorio y lo consideraba un flagelo propio de los países capitalistas; pero el creciente turismo también abrió las puertas a este fenómeno.
La información ofrecida abarca desde enero del 2003 hasta el 31 de julio del 2004.
En ese periodo se incautaron 7,8 toneladas de drogas, unas cinco de ellas en las costas, en 369 recalos de paquetes lanzados desde aeronaves hacia lanchas rápidas que a su vez las trasladan a Estados Unidos.
"Además, la información facilitada por Cuba a servicios antinarcóticos de países vecinos, incluido EE.UU., les permitió incautar volúmenes significativos de estupefacientes, así como capturar al menos cinco embarcaciones, una aeronave y 20 narcotraficantes", comentó el rotativo.
A la operación "Coraza Popular" se sumó la "Ache III" destinada a reforzar las fronteras marítimas.
Según el reporte una de las consecuencias de estos programas fue una creciente seguridad costera y el alejamiento de los contrabandistas por lo que se disminuyó el avistamiento de naves sospechosas y de los recalos.
En los primeros seis meses de este se ha incautado poco más de una tonelada de droga, la mitad de lo ocupado en igual etapa del 2003.
Mientras, los aeropuertos reportaron 14 planes de tráfico internacional abortados, con 24 detenidos y 30 kilogramos ocupados, así como 316 extranjeros que portaban dosis de consumo personal.
Internamente, las autoridades reportaron la erradicación de "pequeñas" plantaciones de marihuana y un control sobre sustancias con efectos alucinógenos en el mercado interno.
Paralelamente se reforzaron las campañas preventivas y los programas de rehabilitación a los pacientes con adicciones.
