WASHIGTON.- El gobierno de Estados Unidos acordó hoy que se realice una auditoría especial de los contratos otorgados por el Pentágono a la empresa Halliburton, principal acreedora de los contratos para la reconstrucción de Irak, según informó una agencia de las Naciones Unidas.
Halliburton ha sido fuertemente cuestionada por presunto aprovechamiento de los contactos de quien fuera uno de su director ejecutivo, el actual Vicepresidente Dick Cheney, para acumular ganancias mediante la reconstrucción y apoyo a las tropas en Irak.
En Irak, la compañía presta servicios como alimentación, vivienda, lavandería y transporte a las tropas estadounidenses en Irak, los que han sido valorados en unos 13.000 millones de dólares.
La Junta Internacional de Asesoramiento y Supervisión (IAMB por sus siglas en inglés), organismo establecido por el Consejo de Seguridad de la ONU para controlar el Fondo de Desarrollo de Irak, se había quejado de la forma en que se otorgaron los contratos.
Halliburton, que fue dirigida por Cheney entre 1995 y 2000, recibió contratos multimillonarios sin licitación, pagados con dinero obtenido de la venta de petróleo iraquí.
Aunque Cheney siempre ha negado haber utilizado sus influencias para que la empresa recibiera tratamiento preferencial, la decisión ha sido blanco de numerosas críticas a nivel internacional y se ha convertido en un tema de debate en la actual campaña electoral en Estados Unidos.
La IAMB sostuvo que Estados Unidos comisionará una auditoría para determinar el alcance de los contratos, resumir las auditorías realizadas por el gobierno estadounidense y determinar si queda algún contrato sin revisar. Una vez que concluya la investigación, se harán públicos los resultados.
