KABUL.- El Presidente interino Hamid Karzai llevaba una fuerte ventaja el domingo en la lucha por convertirse en el primer líder elegido popularmente en Afganistán, a medida que se sumaban los resultados de los históricos comicios.
A pesar de ello, sus rivales y un asesor de la comisión electoral del país dijeron que era demasiado pronto como para declarar al vencedor de las elecciones, cuando hasta el momento sólo se han contado aproximadamente el 7% de los votos.
El oponente más cercano a Karzai, Yunus Qanooni —que actualmente va detrás de él por más de 45 puntos porcentuales—, dijo que espera los hallazgos de un panel de expertos sobre las acusaciones de un presunto fraude electoral antes de reconocer la votación como válida.
"Si son capaces de separar el fraude de los deseos del pueblo, en ese momento veremos si la elección es legítima", dijo Qanooni, antiguo ministro de Enseñanza, a The Associated Press. "Cualquier otra cosa es un golpe de estado", agregó.
De los 595.000 votos contados para el domingo por la tarde, Karzai, el favorito instalado como Presidente de transición después de la caída de los talibanes en 2001, había obtenido el 63,6%.
Aunque el día de la votación, el 9 de octubre, fue pacífico en general a pesar de las amenazas de los rebeldes talibanes de sabotear las elecciones, en días recientes resurgió la violencia por parte de presuntos extremistas antigubernamentales, y en ella murieron dos soldados estadounidenses y hasta cinco afganos.
En lo que va del año han muerto unas 1.000 personas en hechos de violencia política, y hay insurgentes que siguen activos, en especial en el sur y el este del país.
Los afganos están desesperados por vivir en paz, después de sufrir conflictos que se remontan a la ocupación soviética en la década de 1980. Por este motivo, las elecciones respaldadas por las Naciones Unidas —las cuales costaron unos 200 millones de dólares— generaron un enorme interés. Según un cálculo inicial, ocho de cada 10,5 de electores empadronados emitieron su voto.
El conteo comenzó lentamente el jueves después de cinco días de retrasos, al tiempo que el panel de tres expertos extranjeros daba seguimiento a unas 100 acusaciones de fraude electoral presentadas por los 16 candidatos, incluyendo a Qanooni.