PHOENIX.— La policía seguía tratando de determinar el domingo quién era el chofer de una camioneta robada y llena de inmigrantes ilegales que chocó contra otros vehículos y se volcó, matando a seis personas e hiriendo a 15, algunos de ellos de gravedad, luego que el individuo que interrogaban resultase ser un pasajero.
Las autoridades estaban interrogando a cuatro presuntos inmigrantes ilegales, dijo Andy Adame, portavoz de la patrulla fronteriza.
Los investigadores piensan que la camioneta iba a aproximadamente a 145 kilómetros por hora cuando el chofer perdió el control en una intersección cerca de Fort Huachuca, un puesto del ejército junto a Sierra Vista, en el sureste de Arizona, dijo el domingo el vicejefe de bomberos Randy Redmond. Al menos 17 personas estaban en la camioneta, dijo Redmond.
Las autoridades habían dejado de perseguir a la camioneta antes de que ocurriese el accidente.
Cinco personas murieron en la escena del accidente entre 11 autos el sábado y otra víctima murió más tarde en el hospital. Once personas seguían graves el domingo, dijo Preston, quien agregó que 17 personas viajaban en el vehículo, incluyendo dos mujeres y un niño.
“Fue un choque horripilante”, dijo.
Los pasajeros salieron despedidos de la plataforma del camión cuando éste golpeó un terraplén y comenzó a dar vueltas, golpeando a varios vehículos detenidos, dijo Randy Redmond, subjefe del Departamento de Bomberos en Sierra Vista.
“Es el peor accidente múltiple con víctimas en el que he estado”, dijo Redmond.
El impacto arrancó el techo de algunos automóviles y dejó atrapados a algunos conductores en sus vehículos, añadió Redmond.
James Lee, de 74 años, y Emilia Lee, de 71, ambos de Huachuca City, murieron cuando la camioneta chocó con su auto. Las otras cuatro personas murieron en la camioneta, pero sus nombres no fueron revelados.
Las autoridades en el condado de Cochise opinaron que el camión transportaba a inmigrantes ilegales. El vehículo fue detectado cuando salía de entre algunos arbustos al lado de una autopista.
Algunos agentes siguieron el vehículo durante un breve periodo, dijo Carol Capas, portavoz del jefe policial.
Las autoridades solicitaron refuerzos y dejaron de perseguir el vehículo, después de que el sospechoso aceleró y comenzó a conducir en forma imprudente, señaló Capas.
La policía de Sierra Vista colocó clavos en la carretera, para reventar los neumáticos del vehículo, según Frank Valenzuela, portavoz del Departamento de Seguridad Pública.
