LIMA.- Un juez civil de la ciudad de Arequipa denunció penalmente hoy a los ministros peruanos que firmaron un decreto de necesidad y urgencia que autorizó la reanudación de los vuelos de Lan Perú, pese a que había ordenado la suspensión de la filial local de la compañía aérea chilena.
El titular juez Eloy Zamolla presentó la denuncia penal contra los miembros del gabinete de Alejandro Toledo, por desconocer un fallo precedente de su autoría, que imponía la suspensión de las actividades aéreas de la compañía.
El juez apuntó su denuncia especialmente contra el ministro de Transportes y Comunicaciones, José Ortiz, "por resistirse a la autoridad, al no haber dado cumplimiento inmediato a la resolución judicial del cese de operaciones de Lan Perú", explicó al periodismo.
La denuncia también alcanza a la Corporación Peruana de Aviación Comercial y a otras autoridades vinculadas con la reanudación de las operaciones de Lan Perú, subsidiaria de Lan Chile, pese a la resolución judicial.
"Lo que estoy haciendo es cumplir con mi función, al presentar la denuncia contra el ministro de Transporte, la dirección de Aeronáutica Civil y los funcionarios que resulten responsables de la emisión del Decreto de Urgencia, que interfiere gravemente en el orden constitucional y en el proceso judicial", dijo Zamalloa.
El gobierno peruano promulgó el viernes un decreto de urgencia que autoriza al Ministerio de Transportes y Comunicaciones a otorgar licencias a aerolíneas cuyos permisos se hayan suspendido, en obvio beneficio de Lan Perú.
En la práctica, el cese de operaciones de Lan Perú dictado por Zamalloa duró 14 horas, entre las 0 y 14 del viernes (5 y 19 GMT).
El sector aerocomercial peruano se encuentra en crisis debido a los problemas internos que enfrenta la empresa Nuevo Continente, que dominaba el mercado local.
Lan Perú cubre el 55 por ciento del mercado peruano y 35 por ciento del transporte de carga nacional, mercado que logró ampliar luego de la crisis de Nuevo Continente.
La línea aérea Nuevo Continente en el nuevo nombre comercial de ex AeroContinente, que perteneció al cuestionado empresario peruano Fernando Zevallos, que enfrenta procesos judiciales por su supuesta vinculación con el narcotráfico.