LONDRES.- El primer ministro británico, Tony Blair, reunirá el jueves a los principales ministros de su gabinete por la solicitud estadounidense de que Gran Bretaña envíe tropas a zonas más peligrosas en Irak, lo que podría tener una respuesta positiva.
Lo más posible es que la petición tenga una respuesta positiva en el encuentro de ministros, que se reunirán en una sesión semanal a partir de las 0830 GMT y podrían acordar un hacer un anuncio al parlamento el mismo día, aunque según algunas fuentes políticas, el tema podría demorarse algo más.
El miércoles por la noche funcionarios insistieron en que aún no se había tomado ninguna decisión, pero fuentes del gobierno indicaron que no rehusarán la petición estadounidenses salvo que los jefes militares británicos dijeran que no pueden convocar la fuerza requerida.
El portavoz de Blair no dio detalles sobre el tema. "La decisión se tomará en el momento adecuado, de la forma adecuada", dijo y rehusó mencionar posibles cronogramas.
Un equipo de reconocimiento ha estudiado la posibilidad de que las tropas de Gran Bretaña avancen al norte de su base en Basora, una ciudad relativamente tranquila en el sur de Irak. ¶
El lunes, el secretario de Defensa Geoff Hoon dijo que esperaba que esta semana tendría un reporte de los jefes militares. ¶
Hoon dijo que no habría ningún castigo si se negaban, pero que eso implicaría fallarle a un aliado. En tanto, el canciller británico Jack Straw dijo que su país era muy receptivo al pedido norteamericano. ¶
Estados Unidos ha solicitado a Gran Bretaña que sus tropas patrullen las áreas volátiles cerca de Bagdad a fin de liberar fuerzas estadounidenses para que puedan enfrentar a los insurgentes en puntos calientes como Faluya.
Hasta ahora, los británicos se han concentrado en Basora. Desde que comenzó la guerra en Irak, 68 efectivos de Gran Bretaña han muerto, en comparación con las más de 1.000 bajas estadounidenses.
Blair ha confirmado que si se realizara el despliegue pedido, implicaría la participación del regimiento de la Guardia Negra del ejército, pero se comprometió a que regresarían a casa para Navidad, sugiriendo que un eventual asalto contra Faluya no estaría lejos.