"El príncipe Harry fue golpeado en la cara con una cámara, cuando los fotógrafos se amontonaron alrededor de él en el momento que subía a un auto", explicó la casa real.
LONDRES.- El príncipe Harry de Inglaterra, hijo menor del príncipe Carlos y la fallecida Lady Di, golpeó esta madrugada a un fotógrafo en la boca, luego de un confuso incidente fuera de una discoteca nocturna en Londres, se informó hoy.
Sin duda, este hecho vuelve a sumir a la familia real británica en un nuevo escándalo.
El joven de 20 años, tercero en la línea de sucesión a la corona británica, se disponía a abandonar el exclusivo club nocturno Panagea, en el West End londinense, cuando un grupo de fotógrafos se acercó a él para sacarle fotos, presumiblemente para ser publicadas en tabloides británicos.
Un portavoz de Clarence House, residencia oficial de Carlos y sus hijos en la capital británica, declaró hoy que Harry "sólo se defendió cuando fue golpeado con una cámara", en un hecho que ocurrió a las 3 de la madrugada.
"El príncipe Harry fue golpeado en la cara con una cámara, cuando los fotógrafos se amontonaron alrededor de él en el momento que subía a un auto", explicó el vocero real.
"Al tratar de sacarse la cámara fotográfica de encima, tenemos entendido que golpeó a un fotógrafo, quien se abrió el labio", agregó.
El polémico incidente ocurrió sólo una semana después que Harry fuera acusado por una ex profesora de la escuela de Eton, en Inglaterra, de haber hecho trampa en sus exámenes de arte.
Tras el hecho de violencia de esta madrugada, Scotland Yard informó: "Estamos en conocimiento del incidente, pero hasta el momento no se ha presentado ninguna queja formal".
El fotógrafo que recibió el golpe, Chris Uncle, del periódico "Evening Standard", habría reportado el incidente a la policía, pero hasta el momento no se ha tomado una acción concreta.
Uncle, de 24 años, declaró que Harry "le pegó deliberadamente".
"El príncipe Harry estaba dentro del automóvil y nosotros (los fotógrafos) seguíamos sacándole fotos. Entonces, de repente, salió del auto y se abalanzó sobre mí mientras tomaba las fotografías. Me golpeó y empujó mi cámara contra mi cara", declaró el fotógrafo al "Evening Standard".
Además, indicó que un grupo de guardaespaldas reales debió llevarse a la fuerza al nieto de la reina Isabel II, que se encontraba en un estado de nerviosismo.
Otro testigo del hecho declaró que el príncipe comenzó a maldecir a los fotógrafos durante el altercado y se escondió poniendo su cabeza en sus rodillas una vez que el automóvil salió del lugar.
Harry, quien habría herido accidentalmente al fotógrafo, espera comenzar en las próximas semanas en la estricta academia militar de Sandhurst, donde la disciplina y el comportamiento riguroso son esenciales para la finalización de la carrera.
En principio, ningún portavoz de la reina Isabel II se hizo eco del incidente, aunque seguramente el hecho enfureció a la monarca británica, protectora de la seguridad y privacidad de sus nietos.
