NUEVA YORK.- El presidente estadounidense, George W. Bush, y su rival demócrata John Kerry, se lanzaron a la última ofensiva en los estados indefinidos en los sondeos de opinión, cuando faltan diez días para la jornada electoral.
Al hacer campaña en Fort Myers (Florida), Bush apeló a un tema ya familiar, y dijo que el senador de Massachusetts sufre de una "amnesia electoral" que lo llevó a cambiar sus posiciones sobre Irak, describiéndolo como un indeciso incapaz para conducir a Estados Unidos en tiempos de graves amenazas.
Por su parte, Kerry, en el tradicional bastión republicano de Colorado, replicó al jefe de la Casa Blanca alegando que permitió que el responsable de los ataques del 11 de septiembre de 2001, Osama bin Laden, "se escapara por la puerta trasera" cuando estaba atrapado en Afganistán.
Colorado es uno de los estados en los cuales Bush lleva una estrecha ventaja, pero donde Kerry está intentado revertir esa tendencia, apelando especialmente a la creciente población de origen latinoamericano.
Luego continuará dedicando su tiempo y sus recursos en Nevada y Nuevo México, apretadamente ganados en 2000 por los demócratas.
Florida, que decidió la elección en noviembre de 2000 cuando Bush ganó por 547 votos sobre un total de 6 millones de votantes, está siendo cortejado por los demócratas para poder revertir ahora aquella suerte.
Kerry arribó a ese estado en la noche del sábado y su compañero de fórmula, el senador John Edwards, hizo campaña en Orlando, donde acusó a la administración Bush de trabajar en un plan para elevar la edad de retiro.
Aludiendo a un artículo de la revista Forbes, Edwards dijo que los asesores de Bush están trabajando un plan para preparar la privatización del seguro social. La campaña de Bush negó las acusaciones y dijo que Edwards "simplemente está mintiendo".
Mientras tanto, sondeos de opinión que van desde Reuters- Zogby al semanario Newsweek, le concedieron al presidente una ventaja de dos puntos sobre Kerry, bien dentro del margen de error, mientras la revista Time le dio a Bush cinco puntos más que su rival, con un margen de error de 4 por ciento.