LONDRES.- Las tropas británicas que han empezado a desplegarse en el centro de Irak, bajo control estadounidense regresarán al Reino Unido en Navidad, aseguró hoy el primer ministro británico, Tony Blair.
Tras reafirmar el retorno de esas tropas, Blair precisó que 850 soldados del regimiento de infantería "Black Watch" comenzaban hoy a trasladarse desde su base relativamente segura de Basora (sur iraquí) al peligroso "triángulo suní", formado por Faluya, Ramadi y Bagdad.
"Los ’Black Watch’ regresarán a casa en Navidad", insistió Blair en su comparecencia semanal ante la Cámara de los Comunes.
El refuerzo militar, a petición de la Administración estadounidense, en el centro de Irak responde a una "operación conjunta" para "garantizar que las elecciones puedan celebrarse en enero" en el país del golfo Pérsico, reiteró Blair.
Preguntado si los "Black Watch", una vez que regresen al Reino Unido en Navidades, serán reemplazados por otras fuerzas británicas, el jefe del Gobierno respondió: "No creemos que se produzca otro requerimiento para nuestras tropas. Pero no puedo garantizar eso".
"No puedo garantizar eso -insistió- porque, obviamente, no sé qué situación puede darse. Lo que sí sé es que, si ocurre alguna contingencia, somos capaces de atajarla".
Además, el primer ministro acusó a los liberal-demócratas, tercer partido británico y opositor a la guerra de Irak, de buscar "agujeros en la estrategia" de la coalición, lo que "no ayuda al esfuerzo global" que se está haciendo en el país árabe.
Blair volvió a hacer hincapié en que la mejora de la situación en Irak interesa a la "seguridad" del Reino Unido.