CIUDAD DEL VATICANO.- Juan Pablo II presidirá todos los ritos de Navidad, se reunirá el 27 de noviembre con el patriarca ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I, y conmemorará el 8 de diciembre el 150 aniversario de la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción, confirmó hoy el Vaticano.
El calendario de celebraciones que presidirá el Papa hasta finales de diciembre de 2004 demuestra que a pesar de su debilitado estado de salud, Juan Pablo II, de 84 años, no renuncia a presidir las largas y solemnes celebraciones litúrgicas de la Navidad, entre ellas la Misa del Gallo, como ha hecho a lo largo de todo el Pontificado.
Juan Pablo II presidirá el próximo 11 de noviembre en el Altar de la Confesión de la basílica de San Pedro una misa en sufragio por los cardenales y obispos fallecidos este año.
El 27 de noviembre dirigirá una solemne celebración ecuménica durante la que entregará al Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I, las reliquias de los santos Gregorio Nazianzeno y Juan Crisóstomo, obispos y doctores de la Iglesia, que se guardan en el Vaticano.
Las reliquias de los dos patriarcas ortodoxos fueron sacadas de Constantinopla, según los ortodoxos, en el año 1204, cuando el saqueo de esa ciudad por parte de los cruzados, y acabaron en el Vaticano.
Bartolomé I se interesó por las mismas durante la visita que realizó a la Santa Sede en junio de este año, con motivo de la festividad de San Pedro y San Pablo, y el Vaticano accedió a devolverlas.
En un principio se pensó que fuera el propio Juan Pablo II quien las llevase a Estambul y se llegó a hablar incluso del 30 de noviembre, fiesta de San Andrés, patrón de la Iglesia Ortodoxa, pero al final se ha decidido que la entrega se haga en el Vaticano.
El 8 de diciembre presidirá en la basílica de San Pedro una misa solemne con motivo del 150 aniversario de la proclamación del dogma de la Inmaculada por parte del papa Pío IX el 8 diciembre de 1854.
El dogma fue proclamado con la bula “Ineffabilis Deus”, que declara que María por una gracia especial de Dios fue preservada de todo pecado desde su concepción.
Juan Pablo II viajó los pasados 14 y 15 de agosto al santuario mariano de Lourdes, en el sur de Francia, para conmemorar este dogma, ya que cuando la Virgen se apareció a la niña Bernadette en 1858 le dijo “yo soy la Inmaculada Concepción”.
Para seguir la tradición, el día 8 por la tarde acudirá a la plaza de España en Roma para postrarse ante la imagen de la Inmaculada Concepción.
El martes 14 de diciembre el obispo de Roma presidirá la tradicional misa por los universitarios de los ateneos de Roma.
El 24 de diciembre a medianoche acudirá de nuevo a la basílica de San Pedro del Vaticano para oficiar la larga y solemne Misa del Gallo y al día siguiente, desde la plaza de San Pedro, pronunciará el siempre esperado Mensaje de Navidad e impartirá la bendición “Urbi et Orbi”, a la ciudad de Roma y a todo el mundo.
El 31 de diciembre celebrará en la basílica vaticana el tradicional “Te Deum” de acción de gracias.
