SAN DIEGO. Los guardias de un puesto fronterizo cercano a la ciudad de San Diego (California) pusieron al descubierto una forma nueva para entrar ilegalmente a Estados Unidos: una piñata.
Según informó hoy el diario "San Diego Union Tribune", los inspectores encontraron a una niña en el interior de una piñata cuando revisaban el pasado 2 de noviembre la carga de un automóvil en el puesto de control de San Ysidro.
Hasta ahora los modos preferidos y conocidos por los inspectores eran los de gente metida en rollos de alfombras, en lavadoras o, asientos de automóviles.
Fuentes del Servicio de Aduanas señalaron que sólo se sabía que las piñatas eran usadas para el contrabando de drogas, además de ser un objeto de felicidad para los niños durante las fiestas de cumpleaños.
Tras revelar su sorpresa con este nuevo uso, portavoces de los Servicios de Aduana y Protección Fronteriza informaron de que la niña, cuyo nombre no se ha facilitado, gozaba de excelente salud y no había tenido problemas para respirar durante todo el tiempo que estuvo metida en la piñata.
"Los agentes comenzaron a sacar las piñatas y una de ellas era mucho más pesada que las otras", dijo Vince Bond, portavoz de los servicios de aduana.
"Adentro había una niña de aproximadamente 4 ó 5 años de edad", añadió.
Esa no fue la única sorpresa. En el maletero del vehículo los agentes encontraron a la madre de la niña y al hermano, de unos nueve años, debajo de uno de los asientos.
La niña, la madre y el hermano fueron deportados "voluntariamente" a México, señaló.
El automóvil, con placas de California, era conducido por una mujer estadounidense que era acompañada por un hombre de la misma nacionalidad, dijeron las autoridades.
Un portavoz dijo que ninguno será procesado judicialmente por contrabando de personas, porque se trata de un caso menor.
