LONDRES.- El príncipe Carlos de Inglaterra es objeto hoy de las críticas de la prensa británica por un memorándum en el que criticaba la educación actual por hacerle creer a la gente que puede superarse y dejar el sitio que le corresponde en sociedad.
En el memorándum, utilizado para justificar el despido de una empleada de origen afro-caribeño, el príncipe de Gales afirma que el moderno sistema educativo va contra la selección natural.
Por culpa de ese sistema, todo el mundo se cree capaz, según el Príncipe, de "llegar a estrella del pop, juez del tribunal supremo, brillante presentador de televisión o jefe de Estado (...) sin el trabajo ni la capacidad necesarios".
Según el heredero del trono británico, esas ideas equivocadas son fruto del "utopismo social" imperante, que considera que es posible "manipular genética y socialmente" a los individuos en contra de las "lecciones de la historia" y las "realidades de la naturaleza".
El memorándum de la discordia fue una de las pruebas presentadas al comienzo del juicio por despido improcedente de una empleada de la Casa del Príncipe llamada Elaine Day, que afirma haber perdido su empleo tras denunciar las reiteradas humillaciones en el trabajo y el manoseo de un ayudante del hijo de Isabel II.
La antigua empleada, que presentó una denuncia por discriminación sexual, calificó al equipo del Príncipe de "elitista y jerárquico", algo que atribuyó a la creencia de Carlos de Inglaterra de que "todo el mundo tiene que saber cuál es su puesto en la sociedad" y resignarse a él.
El diario "The Guardian", que igual que otros, destaca el suceso en primera página, afirma que los esfuerzos de Carlos de "aparecer como un personaje de la realeza moderno" recibieron "un nuevo golpe" con la revelación del memorándum.
"No trates de elevarte por encima del lugar que te corresponde", titula el "The Daily Telegraph", que, al igual que "The Independent" y otros periódicos, cita extensamente el memorándum principesco.
Las ideas expresadas por Carlos en ese escrito, en el que confiesa abiertamente que le horroriza la ex empleada, a la que califica de "políticamente correcta", van diametralmente en contra de la ’meritocracia’ predicada por el actual gobierno laborista de Tony Blair.
Para "The Independent", las alegaciones contra el Príncipe no contribuirán precisamente a disipar la percepción popular de que el estilo de vida privilegiado del heredero del trono británico alimenta "sus excéntricos hábitos y puntos de vista", algunos de los cuales como los relativos a los riesgos de la "nanotecnología" mueven a risa, según el periódico.
