CUSCO.- Los presidentes de Perú y Brasil suscribieron el miércoles un acuerdo para la construcción de una vía para unir el Atlántico con el Pacífico.
La construcción de 1.200 kilómetros de vía, busca unir los puertos de Assis, en el suroeste de Brasil, con Matarani, Ilo, Marcona y Pisco en el Pacífico sur peruano.
Tiene un costo total de 700 millones de dólares, un 30% de los cuales aportará como financiamiento la Corporación Andina de Fomento (CAF).
El documento fue suscrito por el presidente peruano Alejandro Toledo y el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva en un acto paralelo a la cumbre de presidentes sudamericanos que se realiza en esta ciudad.
"No es un proyecto bilateral, estoy convencido que interesa a todos los países aquí representados en nuestra Comunidad Sudamericana de Naciones que estamos inaugurando (...) es la expresión de nuestros países por superar las distancias que aún nos separa", dijo Lula.
El gobernante brasileño afirmó que "esta obra muy esperada sintetiza nuestra voluntad de hacer de la geografía nuestra mayor aliada, la interacción de la estructura física significa nuevas oportunidades de comercio y acercamiento de nuestros países".
"Es también un requisito para que el continente pueda integrarse de forma más competitiva en una economía globalizada", añadió.
"Muchas gracias, amigo Lula (...) la integración sudamericana ha comenzado", dijo Toledo, al tiempo de asegurar que brasileños y peruanos "juntos saldremos por el Pacífico, a conquistar el mundo".
Destacó que "tenemos una gran promesa los presidentes de la región, antes que concluya nuestra gestión vamos a hacer una caravana por la vía interoceánica terminada".
Agregó que "estamos haciendo integración con descentralización, sólo tienen sentido estas carreteras si aumentamos la producción de esas zonas (...) el esfuerzo de integración con desentralización es un esfuerzo conjunto".
Un documento entregado a la prensa, señala que el flujo comercial entre ambos países permitirá integrar a centros de consumo, que por el lado brasileño suman 10 millones de habitantes de los estados de Acre, Amazonas, Rondonia, Mato Grosso, Mato Grosso do Sul.
Por el lado peruano se beneficiarán, en principio y directamente, poblaciones como Tacna, Huancavelica, Ayacucho, Apurímac.
