CIUDAD DEL VATICANO.— El Papa Juan Pablo II oró hoy por las víctimas de un terremoto y una serie de marejadas subsecuentes en Asia, y convocó a la ayuda internacional para las víctimas.
"La fiesta de Navidad ha quedado entristecida por las noticias provenientes del sureste de Asia, sobre el poderoso terremoto que azotó a Indonesia, con consecuencias en otros países, incluido Sri Lanka, India, Bangladesh, Mianmar, Tailandia, Malasia y Maldivas", dijo Juan Pablo a los turistas y peregrinos congregados en la Plaza de San Pedro.
"Oremos por las víctimas de esta enorme tragedia y manifestemos nuestra solidaridad para todos los que sufren, mientras esperamos que la comunidad internacional actúe para llevar ayuda a las poblaciones afectadas", dijo el pontífice, desde la ventana de su despacho, a los feligreses en la plaza.