BANGKOK.- El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), envió hoy un equipo de sicólogos, siquiatras y pediatras para atender a los niños traumatizados, tras el maremoto que golpeó a Tailandia.
El grupo está compuesto por 36 profesionales, quienes atenderán a los menores en los hospitales y recintos de atención médica improvisados de las provincias de Phuket, Krabi y Phang Nga, situadas al suroeste del país.
Escenas de terror
Un gran número de menores que perdió a sus padres a causa del maremoto del 26 de diciembre pasado, ha sido testigo de escenas espantosas y en estos días el mar les inspira terror.
Unos 300 niños quedaron huérfanos tan sólo en el pueblo de Ban Nan Khem (Agua Salada), en la provincia de Phang Nga, donde tres mil de sus cinco mil habitantes han sido dados por desaparecidos o muertos.
Los expertos de la Unicef, en colaboración con especialistas tailandeses, enseñarán también a profesores de escuela y a familiares de los menores la mejor forma de comportarse con los niños traumatizados.