ESTOCOLMO.- Hacer el amor ruidosamente no es causa de expulsión de un complejo habitacional siempre y cuando ocurra durante el día, falló hoy el propietario de un complejo residencial sueco.
La empresa inmobiliaria Tunabyggen, situada en la localidad de Borlaenge, 220 kilómetros al noroeste de Estocolmo, tomó la decisión ante los reclamos de los vecinos por una pareja de enamorados que hacía el amor por las tardes sin guardar mucha reserva.
Pero la empresa dijo que las relaciones sexuales forman parte de la vida normal de la familia y no pueden ser causal para un desahucio.
La decisión está estipulada en las leyes de Suecia.
Según la ley de vivienda, los vecinos no deben ser perturbados por ruidos fuertes, tales como la música, televisión o hacer el amor por la noche. Pero la ley también respeta el derecho de los inquilinos a tener una normal vida familiar.
La directora de mercadeo de la inmobiliaria Tunabyggen señaló que las quejas sobre los ruidos causados por las relaciones sexuales son comparables a la bulla de los niños cuando su llanto perturba a los vecinos.
La queja fue desechada, agregó, porque el ruido no era producido durante la noche.
