BRASILIA.- Al menos 16 empleados de un centro correccional de menores en Brasil fueron detenidos por torturar a 60 internos del plantel, mientras en otro reformatorio hubo un motín posiblemente inducido por custodios.
El secretario de Justicia, Alexandre de Moraes, dijo que fueron cesados los 16 empleados y que están prófugos otros siete acusados también de torturas en el centro de la Fundación Estadual para el Bienestar del Menor (Febem) en la ciudad de Sao Paulo.
"La minoría criminal que practica eso no debe estar en la Febem, debe estar en la cárcel", manifestó De Moraes, quien también es el presidente de esa fundación.
Los 16 detenidos, incluida una mujer, trabajaban en contacto directo con los menores internados en el Complejo de Vila Maria en la zona norte de la metrópoli paulista.
Los acusados fueron denunciados por los propios adolescentes afectados como los responsables de una supuesta sesión de tortura que habría ocurrido esta semana dentro de la unidad luego de un motín en protesta, según los internos, por las malas condiciones a que eran sometidos por los custodios.
El presunto resultado de las "torturas" fue registrado en un video grabado por el Ministerio Público. Los jóvenes aparecen con marcas en la mayor parte del cuerpo, incluso en la cabeza. En una sala de acceso restringido a los guardias fueron encontrados hierros y madera que habrían sido usados en el ataque. Los empleados negaron los cargos y afirmaron que no han agredido a nadie.
El presunto material de tortura había sido capturado en un registro en las celdas de los internos. Sin embargo, mientras el secretario de Justicia y presidente de la Febem realizaba una visita al centro correccional de Vila Maria surgió un motín en el reformatorio Unidad Tatuapé, también de la Febem.
Al parecer la revuelta terminó sin mayores incidentes, de acuerdo a versiones de prensa. "Con la noticia de o vendría aquí, coincidentemente, comenzó la rebelión. No puedo comprobar que hubo facilitación, pero es mucha coincidencia", dijo De Moraes.
