RIO DE JANEIRO.- A pocas horas de que comience el carnaval, el mayor espectáculo callejero del mundo, con su derroche de alegría y sensualidad, Río de Janeiro ya está completamente listo para dar el puntapié inicial al desfile de las tradicionales escuelas de samba.
El embrujo de las noches de desenfreno se ha apoderado de la ciudad, donde los talleres de confección de disfraces, las bandas callejeras y los arreglos finales del Sambódromo, componen el paisaje previo al gran evento.
Tal como se hacía antiguamente, un cortejo que lleva al Rey Momo abrirá hoy los festejos del carnaval, reviviendo el clima de 1933 cuando se oficializó el espectáculo en la ciudad.
El séquito incluirá un carruaje tirado por seis caballos y tres autos Ford que en su interior llevarán al rey "Momo", su reina y su princesa.
Momo es intepretado este año por Marcelo Reis, un conocido fotógrafo de Brasil que se ganó el derecho de llevar la corona del rey del carnaval, bañada en oro de 18 quilates y fabricada en piedras de fantasía y cristales.
A su llegada al Palacio de la Ciudad, donde funciona la sede de gobierno del Estado, el "Rey Momo" recibirá las llaves de Río de Janeiro, según comentó la Secretaría de Turismo.
Tras cuatro meses de arduos ensayos, las 14 escuelas de samba ultimaban esta semana sus coreografías y disfraces que otorgan sensualidad, color y extravagancia al show que ofrecerán en el Sambódromo, la pasarela de menos de 1 kilómetro en la que compiten por el título de Gran Campeona.
Como la atención de la prensa está asegurada, personajes de la farándula local e incluso famosos internacionales se disputan el honor de desfilar con alguna escuela o, en el caso de las mujeres, ser nombradas Reina de la Batería, que desfila junto al corazón musical de las agrupaciones.
En los desfiles participan alrededor de 5 mil bailarines elegidos cuidadosamente por las escuelas. Para elegir a la mejor, los jueces toman en cuenta la habilidad de los participantes, la interpretación de samba y la creatividad de las carrozas.
Lo más "in" de la farándula
Entre las celebridades internacionales que se esperan este año en Río figuran cinco ex miembros del grupo puertorriqueño Menudo y la modelo Naomi Campbell, quienes ya tienen entradas aseguradas para los desfiles de los clubes de samba del Grupo Especial, la principal atracción del carnaval.
Otros famosos que se esperan esperados, pero que aún no han confirmado su presencia, son la actriz estadounidense Pamela Anderson y el también actor americano Cuba Gooding Jr., que se encuentra actualmente en la ciudad y al parecer ya ha asistido a algunos ensayos de clubes de samba.
La única preocupación por ahora de las autoridades es la previsión de mal tiempo para los días centrales del Carnaval. El año pasado, la lluvia dañó los desfiles de las escuelas Virodouro y de Beija-Flor, que al final se coronó como Gran Campeona por su alegoría sobre la preservación del Amazonas.
Pero seguramente no será la lluvia la que frene los festejos del Carnaval, pues pese a los anuncios de mal tiempo, Río de Janeiro enfrenta una invasión de turistas y su población -estimada en 6 millones de personas- aumentará 10% durante los cuatro días de carnaval, según datos de la Empresa Brasileña de Turismo.
Los 770.000 turistas que se esperan generarán ingresos cercanos a los 557 millones de dólares, un volumen 12% superior al carnaval del año pasado.
Para ellos y para todos los locales que asistan al Carnaval, irá dirigida la campaña ¡Vístase, use siempre condón!, promovida por el ministerio de Salud con la que espera evitar la propagación del sida en las fiestas del desenfreno. Para eso, once millones de preservativos serán repartidos durante la gran fiesta de Brasil.
En tanto, la seguridad estará a cargo de unos 30.000 policías, que serán desplegados en la ciudad durante los días del carnaval, anunció este jueves la Secretaría de Seguridad Pública.
