SANTO DOMINGO.- Un espeluznante caso de abuso sexual y canibalismo quedó al descubierto esta semana cuando el diácono del albergue "La Ciudad de los Niños, San Francisco Javier", de República Dominicana, donde fueron violadas 12 niñas, reveló detalles de los delitos cometidos en el lugar.
El diácono Rigoberto de Jesús González Padial dijo que el testimonio de las niñas va más allá de las violaciones denunciadas y se quejó de que ni la fiscalía ni las autoridades de la Iglesia Católica actuaran cuando entregó los primeros antecedentes, hace seis meses.
Explicó que cuando recibió informaciones sobre los supuestos sacrificios humanos, de inmediato lo comunicó a sus superiores, quienes le aconsejaron acudir ante la justicia.
Narró que las niñas le dijeron que dos de ellas se encargaban de lanzar en un hoyo los restos de los cuerpos que no podían consumir durante los rituales.
En una entrevista transmitida por el programa El Día, de Canal 11, González Padial no reveló los nombres de los supuestos participantes en los rituales de canibalismo, argumentando que la fiscalía tiene el expediente y que corresponde al ministerio público decirlo.
El diácono comentó también que una niña de cinco años le dijo que había tenido en sus manos el corazón de una de las personas asesinadas, mientras otra menor le narró que había matado con sus propias manos a una madre y su bebé.
Indicó que cuando se sintió alarmado por las narraciones, otra de las menores le inquirió que él también había "comido personas", porque en una ocasión sustituyeron la carne de res del refrigerador del albergue por carne humana.
El primer escándalo relacionado con este albergue, en el que había 19 niñas huérfanas o de familias de escasos recursos, se produjo en febrero del 2002, al denunciarse que la cocinera Dolores Mejía había violado a varias de las niñas.
Por este hecho la mujer fue condenada a 15 años de prisión, en primera instancia.
Una segunda querella formalizada en marzo del 2004 implicaba a dos sacerdotes que fueron detenidos en esa oportunidad.
