Jacinta y Francisco Marto (a los extremos) acompañados de su prima Lucía (al centro).
LISBOA.- El Obispado de Leiría-Fátima anunció hoy que ha completado el proceso para la canonización de los niños pastores Jacinta y Francisco Marto con la entrega al Vaticano del "dossier" y que ahora le corresponde al Papa Juan Pablo II declarar santos a los beatos.
"Puedo afirmar que ya fue entregado el denominado 'Positio', el documento final para la canonización de los dos niños pastores", dijo el Obispo Serafim Ferreira e Silva en una eucaristía solemne dedicada a los videntes de las apariciones de la Virgen María en Fátima.
Agregó que los obispos portugueses ahora esperan que "el Papa Juan Pablo II pueda proclamar la canonización y declarar el culto público para todo el universo católico de los beatos Jacinta y Francisco Marto".
Ferreira e Silva explicó que el documento entregado en el Vaticano incluye el parecer de médicos, teólogos y obispos sobre éste caso.
Para justificar el proceso de canonización, los peritos católicos confirmaron la existencia de un milagro que consistió en la cura de diabetes de un bebé portugués que se encontraba en Suiza, en el momento de la beatificación de los niños pastores por el Papa Juan Pablo II, en mayo de 2000.
El obispo de Fátima también recordó a la hermana Lucía, prima de los dos beatos y quien falleció la semana pasada.
Según Ferreira e Silva, la trayectoria religiosa de la hermana Lucía, quien vivió en clausura en el Carmelo de Coimbra, además de ser una de las videntes de las apariciones de la Virgen, deben permitir en un futuro su beatificación.
Los restos mortales de la hermana Lucía do Corasao Imaculado, última sobreviviente de los videntes de Fátima, recibieron sepultura el pasado 15 de febrero en el convento donde pasó enclaustrada los últimos 48 años en Coimbra (centro), entre muestras de emoción de miles de personas llegadas de todo Portugal.
