BUENOS AIRES.- El gobierno argentino decidió hoy solicitarle al Vaticano "que le requiera la renuncia" al obispo castrense Antonio Baseotto, a raíz de sus duras críticas al ministro de Salud, Ginés González García, por su postura en favor de la despenalización del aborto.
El titular del Palacio San Martín, Rafael Bielsa, tras una reunión que mantuvo con el presidente Néstor Kirchner, expresó en conferencia de prensa que el gobierno argentino "estima que la presencia de monseñor Baseotto no es lo que aconsejan las circunstancias".
Antes, Baseotto había expresado su "pesar" luego de la polémica que provocó su declaración en la que pedía "colgarle una piedra al cuello y tirar al mar" al ministro de Salud por su postura en favor de la despenalización del aborto.
El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), obispo Eduardo Mirás, anunció que recibió hoy una nota de Baseotto en la que expresa su "pesar por la confusión y malestar" que causó la polémica frase del Evangelio que utilizó en una carta dirigida al ministro de Salud.
El monseñor Mirás remarcó que Baseotto aclaró que "de ninguna manera ha querido alentar un acto de violencia ni ofender la autoridad de un miembro del gobierno nacional" con su frase de "tirar al mar" al ministro.
Ayer, tras la polémica que desataron las declaraciones de Baseotto, el ministro de Defensa, José Pampuro, lo citó en su despacho y le expresó el malestar del Gobierno por sus dichos tomados de una alegoría bíblica "no afortunada".
Durante el encuentro, que se produjo por la mañana en el edificio Libertador, el ministro mantuvo un diálogo "cordial" con Baseotto, quien en general respaldó sus dichos y dijo tener el respaldo incluso de las máximas autoridades de la Iglesia en Roma, según explicó Pampuro al finalizar la reunión, informó lanacion.com.ar.
