CARACAS.- El líder cocalero boliviano Evo Morales expresó su apoyo al proceso que lidera el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ante la supuestas amenazas de agresión por parte de "el imperio", que calificó como la "agonía del capitalismo".
"Damos nuestra solidaridad y pleno apoyo al pueblo venezolano en la lucha contra el imperio, esas amenazas son la agonía del sistema capitalista, esas amenazas son miedo a los pueblos, los pueblos marchamos con firmeza y pronto liberaremos a Latinoamérica", indicó Morales en el acto de clausura de la IV Cumbre de la Deuda Social realizada en Caracas.
El jefe del partido Movimiento al Socialismo (MAS) llamó a rescatar la "dignidad" de los pueblos latinoamericanos como parte de las acciones a desarrollar para acabar con el "yugo" de las potencias y el neoliberalismo.
Morales destacó que es necesario cambiar los modelos económicos y acabar con las imposiciones del Banco Mundial.
El dirigente boliviano consideró como una esperanza la realización de las Asambleas Constituyentes que permitan unir a los bolivianos y sacarlos adelante, y condenar a los grupos oligárquicos que quieran dividir a Bolivia para que el proceso constituyente no se lleve a cabo.
En sus breves y aplaudidas palabras ante los asistentes al evento, Morales reiteró que los movimientos sociales indígenas del continente respaldan a Chávez frente al "imperio".
El partido de Morales se consolidó como la principal fuerza política del país en los comicios municipales de diciembre pasado, en los que alcanzó gran parte de las alcaldías.
Chávez ha acusado al gobierno de Estados Unidos de mantener un plan de agresión contra Venezuela para detener el avance de la revolución que lidera su gobierno, que no excluye la tesis del asesinato en su contra, lo que ha sido desmentido categóricamente por Washington.
La IV Cumbre de la Deuda Social, organizada por el Parlamento Latinoamericano, concluyó hoy sus deliberaciones con una propuesta para crear una Carta de los Derechos Sociales Económicos y Culturales que será llevada para su aprobación en la Organización de Estados Americanos (OEA).
El presidente de la Comisión de la Deuda Social del Parlatino, Filinto Durán, destacó que la proposición busca el reconocimiento de los derechos sociales de los pueblos, restablecer el equilibrio en las sociedades y una alternativa de desarrollo sobre bases más humanas, entre otros puntos.
