Sgrena en un video donde suplicaba ayuda durante los días en que estuvo en cautiverio. |
ROMA.- Un agente secreto italiano murió cuando una patrulla estadounidense disparó contra el automóvil que trasladaba en Bagdad, tras su liberación, a la periodista Giuliana Sgrena, quien resultó herida, según fuentes oficiales citadas por medios locales.
El fallecido fue identificado como Nicola Calipari, un experto miembro del SISMI, los servicios secretos militares, que previamente había prestado sus servicios en el espionaje civil.
En la refriega, protagonizada por un blindado de EE.UU. que disparó por causas aún no determinadas, sufrió también heridas otro miembro de los servicios secretos.
Los dos heridos fueron trasladados a un centro hospitalario de la capital iraquí, aunque según las fuentes no revisten ninguna gravedad.
Al parecer, Giuliana Sgrena habría sido herida en el hombro, pero fue protegida por Calipari.
Berlusconi furioso
Frente a los confusos hechos, el Primer Ministro italiano, Silvio Berlusconi, convocó al embajador de EE.UU. en Roma para pedirle explicaciones por el tiroteo.
"He convocado inmediatamente al embajador estadounidense, que deberá aclarar el comportamiento de esos militares por un incidente tan grave, (...) alguien deberá asumir la responsabilidad", dijo Berlusconi en una comparecencia urgente en la sede del Gobierno.
Las autoridades italianas, que informaron de los hechos a Gabriele Polo, director del diario "Il Manifesto", para el que trabaja Sgrena, tratan de reconstruir los hechos, que ocurrieron camino del aeropuerto de Bagdad.
Este episodio ensombreció la alegría que se había desbordado en Italia tras conocerse la noticia de la liberación de la periodista, de 57 años, capturada hace un mes en las inmediaciones de la universidad de la capital iraquí.
Tras varias reivindicaciones, a través de internet, el pasado 16 de febrero los secuestradores difundieron un video en el que la periodista imploraba por su liberación y pedía al Gobierno italiano que retirara sus tropas de Irak.
Poco antes, el Parlamento italiano aprobó la prórroga de la misión militar italiana "Nueva Babilonia", que mantiene desplegados unos 3.000 solados en la ciudad de Nasiriya, al sur de Bagdad.
Las movilizaciones para pedir la liberación de Sgrena no cesaron desde el mismo día en que se conoció su secuestro, hasta la gran manifestación que el 19 de febrero reunió en Roma a cerca de medio millón de personas.
