CIUDAD DEL VATICANO.- Un Pontífice de pocas palabras y apenas vislumbrado tras las ventanas son las más recientes imágenes del papa Juan Pablo II, quien regresó al Vaticano tras dos semanas y media en el hospital, luego de ser operado de la garganta por problemas respiratorios.
Se desconoce si el pontífice de 84 años, quien en los últimos años se las ha arreglado para tener una fuerte carga de trabajo a pesar de enfrentar la enfermedad de Parkinson, sería capaz de recuperarse lo suficiente como para retomar su anterior ritmo de labores en el Vaticano, las cuales suelen incluir audiencias, discursos y otros compromisos.
En medio de todo ello, el Vaticano anunció hoy que no emitiría un nuevo boletín sobre la salud del Papa, al señalar que la fase aguda de su más reciente crisis de salud ha terminado y que continuaría su convalecencia en su departamento sobre la Plaza de San Pedro.
Juan Pablo II enterneció a muchos de sus simpatizantes con sus primeras palabras en público el domingo, en su primera manifestación desde que fue operado el 24 de febrero para insertarle una cánula en la garganta y solucionar sus problemas respiratorios.
Una crisis previa lo mandó al Hospital Gemelli de Roma por espacio de 10 días a principios de febrero. Ahora, estuvo hospitalizado 17 días.
Horas antes de ser llevado a la plaza de San Pedro a bordo de una furgoneta gris, el pontífice pronunció unas cuantas palabras, con la voz débil. Con la mano derecha saludó a los fieles y los bendijo, desde su habitación en el décimo piso del Policlínico Gemelli de Roma.
"Amados hermanos y hermanas, gracias por vuestra visita", dijo. "A todos, tened un buen domingo y una buena semana".
