LONDRES.- La luna de miel del príncipe Carlos y Camilla Parker Bowles en Escocia quedará interrumpida a los seis días de la boda por el deber de cubrir un compromiso oficial, el de inaugurar un patio de recreo para niños cerca de Balmoral.
El acto será el primero al que asistirá la pareja como marido y mujer tras su enlace el próximo 8 de abril en Windsor, a las afueras de Londres, informaron hoy fuentes oficiales.
Lejos de decantarse por destinos exóticos, el heredero al trono y su prometida y futura duquesa de Cornualles han optado por algo más familiar para pasar sus primeros días de casados.
La pareja se instalará en la finca escocesa de Birkhall, propiedad que perteneció a la Reina Madre, situada en las Highlands.
Sin embargo, deberán interrumpir la luna de mil cuando vayan a inaugurar un patio de recreo en Ballater, cerca de la localidad escocesa de Balmoral.
Al acto, Camilla aparecerá por primera vez como miembro de la familia real británica y bajo el título de duquesa de Rothesay, tal y como será conocida en Escocia.
