RIO DE JANEIRO.- El chileno Mauricio Hernández Norambuena, líder del grupo que secuestró en Sao Paulo al publicista brasileño Washington Olivetto, fue tan meticuloso que hasta registró los gastos de los captores en una computadora portátil.
El libro "Na toca dos leoes" (En la guarida de los leones), del escritor brasileño Fernando Morais y que saldrá a la venta la semana próxima, revela detalles inéditos sobre el secuestro, perpetrado en diciembre de 2001 por un grupo de extremistas extranjeros liderados por el chileno.
Según detalles dados a conocer hoy por la prensa, Moraes tuvo acceso a todas las informaciones de las computadoras portátiles de los secuestradores y a otros detalles que la policía no había revelado hasta ahora.
El escritor brasileño, autor de biografías exitosas, como las del futbolista Mané Garrincha -ya llevada al cine-, utilizó estas informaciones en los últimos tres capítulos de un libro biográfico sobre Olivetto, uno de los publicistas más premiados del país.
Olivetto, fundador de la agencia de publicidad W/Brasil, fue secuestrado el 11 de diciembre de 2001 y estuvo en poder de sus captores 53 días, hasta que fue rescatado por la policía en una casa de campo a las afueras de Sao Paulo.
Los tres chilenos, dos colombianos y una argentina nacionalizada española que participaron en su secuestro purgan en Brasil condenas de entre 16 y 30 años de prisión.
Motivos políticos
Los secuestradores alegaron motivos políticos y dijeron ser miembros de los grupos insurgentes chilenos Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) y Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR).
Hernández Norambuena, que admitió que pretendía recaudar con el secuestro unos diez millones de dólares para organizaciones de izquierda de Latinoamérica, es un reconocido líder del FPMR, organización que surgió en la década de los 80 para combatir la dictadura de Augusto Pinochet.
El chileno se fugó en 1996 de una cárcel de alta seguridad de Santiago de Chile en la que cumplía una condena de cadena perpetua por homicidio y secuestro.
El libro de Moraes revela que el chileno tenía archivado en su computadora informes detallados sobre la vigilancia a la que fue sometido Olivetto antes del secuestro y durante el cautiverio, así como las listas de gastos de los secuestradores y hasta un diario del crimen.
Los archivos incluían instrucciones para los secuestradores sobre cómo controlar al cautivo, cómo utilizar códigos para comunicarse en llamadas telefónicas y qué hacer en caso de ser arrestados.
Las computadoras revelaron además que, en caso de que el secuestro de Olivetto fracasara, la organización tenía en su mira al también publicista brasileño Nizan Guanaes, a quien vigiló minuciosamente.
Moraes revela en el libro que la policía tuvo grandes dificultades para descubrir la clave para acceder a los archivos de la computadora, hasta que un agente tecleó el nombre de uno de los equipos de fútbol más conocidos en Chile, el Colo Colo.