PEKÍN.- Pyongyang descartó la posibilidad de mantener conversaciones bilaterales con Estados Unidos mientras Washington siga calificando al régimen norcoreano como un "reducto de la tiranía", informó hoy la agencia oficial de noticias Xinhua.
"Ya hemos dejado clara nuestra posición de que no mantendremos ningún tipo de conversaciones con EE.UU. mientras nos siga considerando un 'reducto de la tiranía'", señaló el portavoz del Ministerio norcoreano de Asuntos Exteriores en una nota publicada por Xinhua.
El portavoz hacía alusión a las observaciones de la Secretaria de Estado de EE.UU., Condoleezza Rice, a principios de este año, que utilizó esas palabras para referirse al régimen estalinista.
"Nunca pedimos una conversación bilateral con EE.UU. fuera del diálogo a seis bandas (con EE.UU., Corea del Sur, Rusia, Japón y China)", agregó el portavoz en un comunicado recogido por la Agencia Central de Noticias Norcoreana (KCNA).
El comunicado añadió que "si EE.UU. desea sinceramente tratar del asunto nuclear a través del diálogo a seis bandas, debería dejar de ignorar e insultar a uno de sus interlocutores e intentar crear un ambiente favorable para la reanudación de las conversaciones".
Dialogar para conseguir una Península Coreana libre de armas nucleares sigue siendo en objetivo del Gobierno norcoreano, concluyó el comunicado.
El origen
El pasado 10 de febrero Pyongyang conmocionó al mundo al reconocer por primera vez estar en posesión de un arsenal nuclear, mientras que el pasado 1 de mayo realizó un ensayo con un misil de corto alcance que aterrizó en el Mar de Japón.
Según Mohamed El Baradei, director general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Pyongyang podría haber desarrollado ya cinco o seis cabezas nucleares, una teoría basada en la cantidad de plutonio en posesión de Corea del Norte, mientras que EE.UU. advirtió de que Pyongyang está a punto de realizar un ensayo nuclear.
Los países implicados en el diálogo manifestaron en los últimos días su preocupación por esta posibilidad y pidieron a China, mediador en el conflicto y principal aliado y suministrador de Corea del Norte, un mayor esfuerzo para convencer a Pyongyang para que regrese al diálogo.
La crisis nuclear norcoreana estalló en 2002 cuando las autoridades de ese país reconocieron estar desarrollando programas de enriquecimiento de uranio y plutonio y expulsó a los inspectores de la AIEA.
Tres rondas de conversaciones a seis bandas se celebraron en Pekín desde 2003 para desmantelar el programa nuclear norcoreano sin grandes resultados, mientras que la cuarta, prevista para septiembre de 2004, fue boicoteada por las desavenencias entre Pyongyang y Washington.