LA PAZ.- Seis policías heridos y dos manifestantes detenidos fue el saldo de un rebrote de violencia en Bolivia, en donde cientos de manifestantes indígenas exigen la nacionalización de los hidrocarburos y piden la renuncia del Presidente Carlos Mesa.
El comandante de la policía boliviana, el general David Aramayo, informó que los seis heridos fueron producto de un ataque hecho por los manifestantes desde una colina del poblado de El Alto durante el bloqueo de la autopista que une esa ciudad con La Paz.
"Fuimos sorprendidos porque ese bloqueo se inició a las cinco de la madrugada y sólo se pudo detener a dos manifestantes, quienes portaban dinamita", agregó.
También se reportó el destrozo de siete casetas de cobro de peaje de la autopista.
"Las mujeres que atendían tuvieron que huir y los daños materiales alcanzan a unos 8.000 dólares", precisó Jorge Núñez, gerente de Toll S.A., concesionaria de la autopista El Alto-La Paz.
Ni la celebración por el día de la madre en Bolivia frenó el viernes las movilizaciones callejeras en El Alto, vecina ciudad de La Paz, en el quinto día de un paro indefinido.
Los alteños piden la nacionalización de los hidrocarburos, la convocatoria a una Asamblea Constituyente, la renuncia del Presidente Carlos Mesa y elecciones nacionales.
Empleados de carnicerías de El Alto, portando los cuernos del ganado, participaron de la protesta donde se quemó muñecos alusivos al Mandatario y al senador Hormando Vaca Díez que preside el Congreso.
Entre tanto, el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, ofreció su ayuda a Bolivia y dijo estar "siguiendo con preocupación las crecientes tensiones sociales" en el país, según un portavoz de la ONU.
"Las Naciones Unidas está lista para ayudar a los bolivianos a hallar una solución a los conflictos que están encarando", dijo el portavoz Stephane Dujarric.
Annan "exhorta a todos los bolivianos a resolver sus diferencias de manera pacífica y democrática con respecto a tópicos importantes de interés nacional, (como) los recursos naturales, la autonomía regional y las propuestas para una asamblea constituyente", dijo Dujarric.
El secretario general de la ONU también pidió a los bolivianos que reafirmen "la necesidad de guiarse por los principios constitucionales y que respeten los derechos humanos", según el portavoz.
La influyente Cámara de Industria y Comercio (Cainco) de Santa Cruz pidió al Presidente Mesa "que dé un paso al costado y convoque a elecciones nacionales".
El sector industrial de Santa Cruz expresó, en un comunicado, su enfado por el bloqueo de carreteras y la duración del conflicto social.
También el senador del Movimiento Al Socialismo (MAS), Román Loayza, que lideró una marcha campesina que recorrió 200 kilómetros para pedir la modificación de la nueva ley de hidrocarburos, anunció el bloqueo total de vías.
"El próximo miércoles iniciaremos el bloqueo de caminos porque no hay voluntad del Parlamento para atender nuestro pedido", dijo.
Las sesiones del Congreso boliviano deberán reiniciarse el martes 31 en La Paz.
Sin embargo, parlamentarios de Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando expresaron que pedirán el cambio de sede.
"Nadie puede trabajar tranquilo con la amenaza de una dinamita en la cabeza. Por ahora será difícil que el Congreso sesione en La Paz", alertó el diputado Dante Pinto, de la NFR.
