REPÚBLICA CHECA.- Hamid Sani, miembro de la familia real de Qatar y que reside hace más de 10 años en la República Checa, fue condenado a dos años y medio de cárcel por mantener contactos sexuales con menores de edad.
El juzgado del Distrito II de Praga emitió este veredicto contra Sani, así como una orden de abandono del país eslavo por tiempo indefinido, con el fin de que pueda ser también procesado en su lugar de origen.
Las tres mujeres cómplices de los delitos, quienes buscaban chicas menores para el príncipe a cambio de una remuneración, recibieron sentencias de prisión condicional, así como la obligación de someterse a un programa correctivo.