BRUSELAS.- Los líderes de La Unión Europea (UE) enfrentaban hoy una mayor presión para que extiendan el plazo de octubre del 2006 previsto para la ratificación de su cuestionada constitución.
El respaldo público del tratado que busca mejorar el proceso de toma de decisiones del bloque tras su expansión reciente a 25 miembros ha disminuido luego de que los votantes franceses y holandeses rechazaran el texto.
Pero los diplomáticos de la UE dijeron que los jefes de Estado estarían muy divididos como para ponerse de acuerdo sobre una fecha límite cuando se reúnan el jueves y el viernes.
Simplemente, podrían optar por una declaración amplia que permita a cada estado miembro seguir su propio camino, al ritmo que le convenga.
No está claro cuántos de los 13 países que aún no han ratificado o rechazado la Constitución continuarán con el proceso.
Los gobiernos de Francia y Alemania han insistido con que la ratificación debería avanzar según lo programado, pero el nuevo ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Philippe Douste-Blazy, dice que París está en mala posición como para aleccionar a otros, y que cada país debería decidir por sí mismo.
El primer ministro sueco Goran Persson dijo al parlamento que el plazo para aprobar el tratado, destinado a garantizar una conducción más estable de la UE y un sistema de votación más claro, debería prolongarse por tiempo indefindo.
Por su parte, Guenter Verheugen, vicepresidente de la Comisión Europea, dijo que la UE necesita más tiempo para considerar cómo proceder y tendría que aceptar una demora en la introducción de las reformas institucionales.
"El cronograma para la ratificación debería extenderse, virtualmente está excluido que el tratado actual pueda ser ratificado para octubre del 2006", dijo Persson a la comisión de asuntos de la UE de Estocolmo.
Agregó que los líderes del bloque deberían volver a evaluar el tema en un año. Si la cumbre de esta semana no acuerda un camino claro hacia adelante, Estocolmo podría demorar su propia ratificación con una votación en el parlamento en diciembre, dijo.
Los sondeos de opinión en varios países que deberán realizar referendos -Luxemburgo, Dinamarca, Polonia, Gran Bretaña y República Checa- han mostrado un avance espectacular del "no" desde que los votantes de Francia y Holanda rechazaran la constitución.
Verheugen dijo al diario alemán Sueddeutsche Zeitung: "La meta original de poner en vigencia la constitución en el 2007 ya no se puede alcanzar".
"Estaría muy mal imponer límites de tiempo ajustados en este momento. Una serie de países simplemente necesitan más tiempo de discusión para restaurar la confianza pública en Europa", añadió.
(Johan Sennero y Patrick Lannin en Estocolmo, James McKenzie en Berlín).