
MANILA.- Un procedimiento de destitución por fraude electoral contra la presidenta filipina Gloria Arroyo fue iniciado este miércoles en el Parlamento, aún cuando las posibilidades de que sea efectivo están consideradas como poco probables.
Una comisión debe ahora decidir si la querella tiene bases suficientes para ser sometida a los 250 diputados.
En tal caso, ésta deber recibir el apoyo de un tercio de ellos antes de pasar al Senado que actúa como un tribunal especial y juzga al Presidente de la República.
Los analistas estiman que el procedimiento tiene pocas posibilidades de culminar en la medida que Gloria Arroyo dispone de numerosos aliados en el Parlamento.
Un diputado de un pequeño partido, Rodante Marcoleta, declaró haber apoyado la querella presentada en la mañana por un abogado, Oliver Lozano, tal como lo autoriza la Constitución.
Un dirigente de la oposición, Francis Escudero, estimó que la acusación podría impedir toda otra tentativa de destitución pues, una vez la querella adoptada, el Parlamento no puede aceptar otra durante un año.
Las acusaciones de fraude tienen por origen una intervención telefónica donde se escucha a una mujer, que sería Gloria Arroyo, hablando a un miembro de la comisión electoral para pedirle que su ventaja en votos sea mantenida.
Por otra parte, la presidenta Arroyo anunció este miércoles que su marido había abandonado el país después de acusaciones en su contra por tráfico de influencias.
Según la prensa, José Miguel Arroyo habría utilizado su posición para influir sobre transacciones y nombramientos decididos por el gobierno.
También está acusado de haber recibido sobornos de los organizadores de una lotería clandestina, caso donde también están acusados el cuñado y un sobrino de la presidenta.