
WASHINGTON.- El segundo caso de vaca loca verificado en territorio estadounidense fue el de un animal nacido, crecido y sacrificado en Texas, informaron fuentes oficiales, al concluir los exámenes del Departamento de Agricultura.
El ejemplar en cuestión tenía 12 años y pudo haber contraído la enfermedad al haberse alimentado con forraje donde fueron trituradas partes de bovinos infectados con ese mal.
Los forrajes para animales de ese tipo están prohibidos desde 1997, después de una epidemia de vaca loca en Gran Bretaña.
El ejemplar infectado fue considerado no apto para el consumo humano antes de ser sacrificado porque no podía sostenerse de pie.
Aunque la vaca en cuestión fue sacrificada en noviembre pasado, hicieron falta casi siete meses para acertar las causas por las que el animal contrajo la enfermedad.