BAGDAD.- Un dinamitero suicida detonó el sábado la carga de explosivos que llevaba ceñida al cuerpo y mató a 20 personas que formaban fila en un centro de reclutamiento de las fuerzas policiales especiales en la capital iraquí, informó un portavoz del Ministerio del Interior.
El atacante llevaba un cinturón con explosivos y se inmoló frente al centro de reclutamiento en el vecindario occidental de Yarmouk, dijo el coronel de la policía, Adnan Abdul Raman, un portavoz del Ministerio del Interior. La mayoría de las víctimas eran reclutas, añadió la fuente.
La explosión sobrevino aproximadamente a las 9.00 (0500 GMT), dijo el teniente primero de la policía, Mayid Zaki. El Hospital de Yarmouk recibió al menos 17 cadáveres y atendió a 21 heridos, señaló Muhanad Yauad, médico de la sala de emergencias.
Varios policías armados llegaron al lugar, a bordo de camionetas blancas, e hicieron disparos al aire, para dispersar a los curiosos, de acuerdo con imágenes grabadas por Associated Press Television News. Los trabajadores de emergencias sacaron cadáveres en camillas.
Los insurgentes que buscan desestabilizar al gobierno iraquí suelen atacar a las fuerzas de seguridad y los centros de reclutamiento, en cuyo exterior se forman largas filas de aspirantes.
Con el ataque, subió a más de 1.400 el número de muertos desde el 28 de abril, cuando el primer ministro Ibrahim al-Jaafari anunció su gobierno encabezado por los chiítas.
Los árabes sunitas conforman el núcleo de los insurgentes. Los sunitas, que dominaron Irak durante décadas, perdieron el poder cuando Saddam Hussein, miembro de esa rama religiosa, fue derrocado por la invasión encabezada por Estados Unidos.
