BAGDAD.- Dos guardias privados de una empresa de seguridad que escoltaban una caravana del consulado de Gran Bretaña murieron el sábado al estallar una bomba al costado de un camino en el sur de Irak.
El ataque ocurrió en una carretera de las afueras de Basora. Los dos guardias trabajaban para la empresa británica de seguridad Control Risks Grupo, informó en Londres la oficina de la secretaría de relaciones exteriores.
El capitán de la policía Mushtaq Kadim dijo que dos niños iraquíes fueron heridos de gravedad cuando un segundo artefacto explosivo estalló cinco minutos después de ser atacada la caravana. Indicó que los atentados ocurrieron en el distrito al-Qiblah, al suroeste de Basora.
Gran Bretaña tiene 8.500 efectivos militares en Irak, la mayoría, en el sur del país. La sede central del comando militar británico se halla en Basora, donde Gran Bretaña tiene también un consulado general con unos 20 empleados.