TOKIO.- El Parlamento japonés se disculpó hoy en una resolución con motivo del 60° aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial por los sufrimientos causados en países asiáticos y otros durante el conflicto bélico.
El texto de la resolución aprobado hoy por la Cámara Baja del Parlamento fue sin embargo más moderado que una resolución de paz de hace diez años atrás.
Japón "lamenta profundamente el enorme sufrimiento que nuestro país le infligió a pueblos asiáticos y otros a través de actos en el pasado", señala el documento.
Pero, a diferencia de una década atrás, no se encuentran allí claras alusiones a la política de agresión de Japón y el dominio colonial.
El gobernante Partido Liberal Democrático (LDP) del Primer Ministro Junichiro Koizumi había rechazado la exigencia opositora de mencionar explícitamente en la resolución la guerra de agresión y la dominación colonial.
El argumento fue que la resolución debía estar más dirigida al futuro, indicaron reportes de los medios. El LDP solamente concedió que el texto hiciera referencia a la resolución de 1995.
El jefe de partido y de gobierno provocó indignación en China y Corea con varias visitas al controvertido santuario de Yasukuni, en el que también son honrados criminales de guerra.
Las relaciones de Japón con China llegaron a su más bajo nivel en tres décadas tras recientes acusaciones de que Tokio no elaboró suficientemente su historia de agresiones durante la Segunda Guerra Mundial y las disputas territoriales entre ambas naciones.
En la resolución aprobada este martes por la Cámara Baja, Japón asegura que continuará aportando a la paz en el mundo, a la vez que se elogia la intervención de las Naciones Unidas por la paz internacional.
La resolución fue aprobada con los votos del LDP, su socio de coalición Komeito y ambos partidos de oposición demócrata y socialdemócrata.
El Partido Comunista votó en contra, porque consideró que el texto mencionaba demasiado poco la guerra de agresión de Japón y su dominio colonial.
Japón capituló el 15 de agosto de 1945, luego de la destrucción causada por las bombas atómicas estadounidenses en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki.
