BUENOS AIRES.- El Servicio Ferroviario de Argentina, que moviliza a unos dos millones de personas diariamente, quedó paralizado hoy por una masiva huelga de 24 horas de los maquinistas en reclamo de aumentos salariales.
El paro, que comenzó en la medianoche del miércoles, afecta a los trenes de carga y de pasajeros, el principal medio de transporte para los dos millones de personas que se trasladan a diario desde las afueras de Buenos Aires hasta sus trabajos en la capital argentina.
El paro de los trabajadores de las líneas de trenes suburbanos que une a la capital federal con las periferias norte y oeste "es total", admitió Gustavo Gago, vocero de la empresa privada Trenes de Buenos Aires (TBA).
Una situación similar se registra en otras líneas que unen a la capital con las pobladas zonas de la provincia de Buenos Aires.
Estaciones vacías
Esta mañana, las terminales ferroviarias de Buenos Aires se encontraban vácías y con los trenes estacionados en los andenes a causa de la huelga convocada por el gremio La Fraternidad de los maquinistas.
Frente a esta movilización, los habitantes bonaerenses optaron por trasladarse en microbuses que circulaban abarrotados, mientras otros lo hicieron en sus autos o en taxis, lo que generó grandes atochamientos en las calles.
El paro fue confirmado la noche del miércoles, luego de fracasar las negociaciones de último momento por un aumento salarial para los trabajadores de los servicios de carga, petición a la que adhirieron los de las empresas de pasajeros.
"Los empresarios ofrecieron 1.500 pesos (500 dólares) de salario básico y el gremio pide 1.820, que es el equivalente a la canasta familiar básica que marca el INDEC (Instituto Nacional de Estadística y Censos)", precisó el titular de La Fraternidad, Omar Maturano.
El servicio ferroviario fue privatizado en los años 90, durante el gobierno neoliberal de Carlos Menem (1989-99).