COLONIA, Alemania.- La Cruz de los Jóvenes, que fue entregada por Juan Pablo II en el año 1984, cuando creó la Jornada Mundial de la Juventud, y que ha recorrido todo el mundo, se desprendió y rompió hoy del barco en el que había sido colocada y en el que el Papa Benedicto XVI tiene previsto desplazarse esta tarde por el Rin.
La caída de la cruz, que mide casi cuatro metros, con brazos de 1,75 metros cada uno y con 35 kilos de peso, se produjo por el fuerte viento que ha afectado a la zona del río, que se encuentra a unos diez kilómetros de Colonia, sede este año para la Jornada Mundial de la Juventud.
El objeto cayó varias horas antes de que Benedicto XVI subiera al barco "Rhein Energie", en el que recorrerá diez kilómetros del Rin y, aunque sufrió algunos daños, éstos fueron reparados inmediatamente.