QUITO.- La petrolera estatal de Ecuador, Petroecuador, suspendió hoy sus exportaciones de crudo, mientras que militares y policías intentaban restaurar el control en instalaciones petroleras tomadas por pobladores de dos provincias amazónicas, quienes exigen inversiones viales y empleo.
Las manifestaciones, que comenzaron el lunes, han incluido ataques contra instalaciones petroleras, las que obligaron a la estatal Petroecuador a recortar drásticamente su producción y a declarar "estado de fuerza mayor".
La medida sigue a un decreto de "estado de emergencia", que comenzó a regir desde el miércoles en la noche, con el despliegue de militares y restricciones a la libre asociación, circulación y opinión en las provincias de Sucumbíos y Orellana, que albergan a los principales yacimientos petroleros del país.
Un portavoz de Petroecuador dijo que la compañía se vio en la necesidad de declarar "estado de fuerza mayor" en sus exportaciones de crudo, una cláusula que le brinda la posibilidad de reprogramar los embarques previstos para el exterior, dependiendo de sus niveles de reservas en puertos.
Petroecuador exporta unos 144 mil barriles por día (bpd), de una producción regular de unos 201 mil. Pero su producción se desplomó el jueves a 29 mil bpd, luego de cuatro días de protestas en las que ha habido brotes de violencia.
Según señaló el portavoz, la compañía quiere precautelar sus reservas de petróleo para abastecer el mercado interno.
Los pobladores y autoridades de las provincias amazónicas de Sucumbíos y Orellana han tomado campos petroleros y han destruido instalaciones de distribución de crudo, como un mecanismo de presión para que las petroleras privadas financien obras de infraestructura y planes de empleo para la zona.
