BAAQUBA, Irak.- Quince iraquíes murieron este martes a causa de la violencia en Irak, incluyendo 11 policías que perdieron la vida por la caída de un obús de mortero en Baaquba, al norte de Bagdad, y otros dos durante un operativo al sur de la capital, según fuentes de seguridad.
Además de los 11 efectivos muertos, 15 personas -entre ellas un niño- resultaron heridas por el obús de mortero que cayó en la comisaría central de la provincia de Dyala, en el centro de Baaquba, según la policía.
Otros dos policías murieron durante un operativo lanzado para detener a un sospechoso de colocar varias bombas artesanales contra convoys de los ejércitos de Estados Unidos e Irak, según la policía de Nayaf, una ciudad sagrada chiíta a 160 km al sur de Bagdad.
Los dos agentes fueron heridos de muerte durante la operación realizada en Khan An Nus, a 40 km al norte de Nayaf. Otros cuatro resultaron heridos, según la misma fuente.
En el norte, cerca de la ciudad de Tikrit, antiguo feudo del depuesto Presidente Saddam Hussein, un empresario, Mondher Ahmed Habib, fue asesinado por hombres armados, según el comandante de policía Khatab Omar.
En el sur del país, el cadáver de un ex general del ejército de Saddam Hussein secuestrado tres días antes, Ibrahim al-Mansuri, fue hallado con huellas de balazos, cerca de un cementerio del centro de Basora, una ciudad portuaria a 650 km de Bagdad, indicó el portavoz policial Karim Zaidi.
Además, seis cadáveres en descomposición fueron hallados en un barrio del sudeste de Bagdad, indicó una fuente del ministerio del Interior.
