SAN PABLO.- El Presidente brasileño, Luiz "Lula" da Silva, aseguró hoy que la crisis política por el escándalo de corrupción "es extremadamente grave" y sostuvo que se encuentra "tranquilo" con las encuestas que por primera vez lo dan perdedor en las elecciones del próximo año.
"La crisis es extremadamente grave, tenemos que tener paciencia y no dejarnos llevar por el estado emocional del momento y sí por la razón. El Estado usará todos los instrumentos que tiene para investigar todo", dijo Lula en un discurso en Uberlandia, estado de Minas Gerais.
El Presidente Lula volvió a compararse con el mandatario Juscelino Kubitschek (1956-1961).
"Los que hoy me atacan hacían lo mismo con Juscelino, que fue acusado varias veces de ser ladrón en la tapa de periódicos, intentaron darle un golpe de Estado, asesinarlo y destituirlo. Y nunca perdió la paciencia. Y no voy a perder la paciencia", dijo.
Pérdida en las encuestas
El Presidente hizo una escueta referencia a la nueva situación que enfrenta en las encuestas, ya que por primera vez es considerado derrotado ante el alcalde de San Pablo, José Serra, en caso los comicios se desarrollaran ahora.
"Durante años no podían por donde atacarme y me atacaron por donde no me pueden atacar: en la cuestión ética. Comenzaron a meterse con el tema de la ética para poner desconfianza en la sociedad, por eso reacciono con tranquilidad, como cuando decían que era imbatible", afirmó.
Lula da Silva fustigó a la oposición al afirmar que muchos de sus dirigentes "hacen campaña política y buscan espacio en la televisión" aprovechando las investigaciones por corrupción.
El Partido de los Trabajadores (PT) del Presidente Lula fue acusado en junio pasado de pagar sobornos a diputados aliados, pero la fuerza descartó esa denuncia y sólo aceptó haber financiado ilegalmente campañas políticas en 2003 y 2004.
