LONDRES.- La feria bianual de armamento de Londres ofrece entre sus productos las controvertidas bombas de racimo, condenadas por las organizaciones humanitarias de todo el mundo por sus efectos sobre la población civil.
Según publica hoy "The Independent", la Feria Internacional de Equipos y Sistemas de Defensa, que se celebra desde ayer hasta el viernes en el recinto Excel de la capital, acoge la venta de ese explosivo, pese a que oficialmente no permite su promoción.
Las bombas de racimo tienen el tamaño de una lata de refrescos y están pintadas de vivos colores, lo que a menudo llama la atención de los niños, sus principales víctimas en las zonas de conflicto.
Aunque la feria londinense no quiere, en teoría, promover su uso, entre las 1.200 empresas que exponen sus productos hay al menos una, la sudafricana Denel, que las vende, denuncia el diario.
Preguntado por el rotativo, un portavoz de dicha empresa, Gyfford Fitchat, recordó que las bombas de racimo no son ilegales y que, en cualquier caso, la compañía sólo las exportará a "países estables y maduros".
Paul Beaver, portavoz de la organización, confirmó la oposición formal de la Feria a ese tipo de explosivo -"que no es siquiera un tema de conversación"-, pero precisó que no se puede impedir a las empresas que lo comercialicen.
Altamente peligrosas
Las bombas de racimo, responsables de causar heridas a unos mil niños en Irak a causa del actual conflicto bélico, según datos de Unicef, no son ilegales, pero son especialmente condenadas por Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales por su poca precisión y grandes "daños colaterales".
Human Rights Watch y la Cruz Roja están entre sus detractores, y han pedido a los Gobiernos que excluyan su uso.
En 2003, el Reino Unido y Estados Unidos lanzaron en Irak 13.000 bombas de racimo, que, al explotar, esparcen pequeños explosivos en un radio de unos cuarenta kilómetros.
Según fuentes de la "Campaña Contra el Comercio de Armas", que desde ayer se manifiesta a las puertas de la feria, hay otras firmas además de Denel que ofrecen bombas de racimo, incluidas la británica BAE Systems y la estadounidense Lockheed Martin.
La Feria Internacional de Equipos y Sistemas de Defensa, la mayor del mundo, acoge empresas de 34 países, entre ellos algunos acusados de violar los derechos humanos, como Arabia Saudí, China, Colombia, Indonesia y Libia.
El Reino Unido, que ha invitado a Irak por primera vez, es el segundo exportador de armas del mundo después de Estados Unidos.
