QUITO.- El Gobierno de Ecuador no interferirá en el posible retorno del ex presidente Lucio Gutiérrez, que ha anunciado su intención de regresar al país, pese a que se le investiga por supuestamente "atentar contra la seguridad del Estado".
Gutiérrez, quien desde abril pasado se encuentra fuera de Ecuador, llegó ayer a Colombia, donde pidió asilo y recibió el permiso para permanecer en ese país.
Según el secretario de Comunicación del Ecuador, José Toledo, el presidente colombiano, Alvaro Uribe, en un gesto de "amistad", telefoneó a Alfreso Palacio "para contarle que Gutiérrez había pedido asilo político".
Medios colombianos aseguraron que a Gutiérrez se le concedió el estatus de refugiado por 90 días y que dicho permiso conlleva la obligación de guardar silencio.
En Colombia, Gutiérrez volvió a afirmar que Palacio le traicionó y que su salida del poder se debió a un "golpe de Estado" organizado por sus enemigos políticos.
Sin embargo, Gutiérrez canceló hoy una rueda de prensa en Bogotá, en la que se esperaba que anunciase su regreso a Quito y pidiese la renuncia de Alfredo Palacio.
Gutiérrez fue destituido el pasado 20 de abril por "abandono del cargo" determinado por el Congreso, que en esa misma fecha designó en su reemplazo a Alfredo Palacio, quien era el vicepresidente de la República.
El secretario de Comunicación de la Presidencia, José Toledo, indicó hoy que Palacio "no tiene nada que ver con que regrese o no el ex presidente.
"Si él quiere regresar, entonces que regrese", remarcó Toledo, tras insistir en que "el Gobierno no interfiere con la justicia", que ha ordenado la prisión preventiva del ex mandatario.
En junio pasado, el ex ministro de Gobierno, Mauricio Gándara, acusó a Gutiérrez de "atentar contra la seguridad del Estado", por unas declaraciones que hiciera contra el Gobierno de Palacio y por incitar a la población a desconocer a su sucesor.
