BISHKEK.- La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, inició hoy en Kirguistán una gira por Asia central consagrada a la defensa de la democracia y la "guerra contra el terrorismo", asegurando que Estados Unidos no compite con Moscú en esta región estratégica.
En cuanto llegó, Rice saludó a los soldados norteamericanos de la base de Manas, en el aeropuerto de Bishkek, que se disponían a participar en las operaciones de socorro en Pakistán, devastado el sábado por un sismo que dejó entre 30.000 y 40.000 muertos.
Rice, que el lunes partió de Washington, visitará Afganistán mañana miércoles y tiene intenciones de realizar una corta visita a Pakistán, antes de viajar el jueves a Kazajstán y Tayikistán.
En Bishkek, participará en una mesa redonda sobre la democracia, las reformas y la Constitución, antes de entrevistarse con el Primer Ministro Felix Kulov y el Presidente Kurmanbek Bakiev.
Asia central, que Rusia considera como su zona de influencia desde el derrumbe de la URSS, tiene gran importancia estratégica para Estados Unidos. Por otra parte, esta región, habitada por numerosos musulmanes, es una base para sus operaciones en Afganistán.
La diplomacia norteamericana tiene tres objetivos en la zona: esforzarse por contener la amenaza islamista, estimular las reformas económicas y alentar la democracia, que Estados Unidos considera como la mejor defensa contra el integrismo islamista.
Sin embargo, Estados Unidos asegura que no abandonará sus ideales democráticos en nombre de la lucha contra el terrorismo. Ya lo demostró en Uzbekistán, donde debe renunciar a su base "K", cerca de Tashkent, en lugar de transigir con el régimen del presidente Islam Karimov, cuestionado por los defensores de los derechos humanos y las organizaciones internacionales después de la sangrienta represión de Andiyán de mayo.
"Nosotros no queremos elegir entre nuestros objetivos en términos de acceso a bases militares y nuestros objetivos en términos de democracia", dijo Rice a algunos periodistas en el avión que la llevaba a la región.
"Pensamos que existe un vínculo estrecho entre nuestros objetivos estratégicos de democratización y la guerra contra el terrorismo", agregó.
Los norteamericanos tendrán que partir de Uzbekistán, pero su base militar en Kirguistán no está amenazada, aunque probablemente deban renegociar la tarifa que piden las autoridades.
Rice insistió en que su gira por esta región no está dirigida contra Rusia.
"Nuestras relaciones en Asia central no están dirigidas contra alguien en particular. En otras palabras, queremos que estos países tengan buenas relaciones con sus vecinos, especialmente buenas relaciones con Rusia", declaró la secretaria de Estado.
"Hace mucho tiempo que ellos tienen relaciones con Rusia -económicas y otros vínculos- y es natural que esas relaciones continúen", señaló.
El diario económico ruso Kommersant afirmó que la gira de Rice estaba destinada a "solucionar dos problemas" importantes para Estados Unidos: "Primero, encontrar un lugar donde transferir la base militar expulsada de Uzbekistán. Segundo, convencer a los dirigentes (de los países involucrados) de crear una organización regional sin la participación de Rusia, China e Irán".