WASHINGTON.- Millares de personas convergieron este sábado en el parque del Mall, en pleno corazón de Washington, para participar de una gran manifestación de la comunidad negra contra el racismo y la pobreza, 10 años después de la "Marcha del millón de hombres".
Cerca de 3.000 autobuses fueron contratados para esta manifestación, según los organizadores, que llamaron a "los pobres y los excluidos" a reencontrarse para "comenzar a tomar las riendas de su destino".
"Es el inicio de una reunificación de los afroamericanos para organizarse y cambiar las cosas", estimó Amon Ra, de 50 años, que condujo más de 10 horas desde Ohio (norte) para participar en la manifestación junto a su hijo.
"Dado que la mayoría de los desempleados son negros, tenemos que encontrarles un empleo para que puedan encargarse de sus familias", agregó.
Las manifestaciones comenzaron desde el amanecer del sábado con toque de tambores, cantos y oraciones. Miles de personas de todas las edades acudieron al parque del Mall bajo un sol radiante.
La movilización marcó los 10 años de una protesta de cientos de miles de afroestadounidenses en Washington, conocida como la "Marcha de un millón de hombres", convocada entonces por el movimiento negro musulmán estadounidense Nation of Islam (Nación del Islam), en 1995.
El sábado, el colectivo de "Millions More Movement" (Movimiento millones más) también convocó a las mujeres y a las minorías a que se manifestaran a favor de la unidad, los valores espirituales, la educación, el desarrollo económico y la participación en la vida política.
Sarah Thompson, una estudiante de 21 años oriunda de Georgia (sur), opinó en este contexto que los "jóvenes no son apáticos y que las mujeres jóvenes son realmente valiosas. Nosotras vamos a defender el sueño de nuestros ancestros", agregó.
A los 86 años, Ernest Twyman, que vive en Washington, se animó a opinar que los negros continúan viviendo "una esclavitud económica".
El presidente George W. Bush "no ha hecho nada" por la comunidad negra, aseveró. "Los ricos son cada vez más ricos y los pobres son cada vez más pobres", añadió.
La manifestación fue convocada por importantes personalidades negras -políticos, celebridades, estrellas del hip-hop, empresarios-, entre ellos el líder de Nation of Islam, Louis Farrakhan, el pastor cristiano Jesse Jackson y el reverendo cristiano Al Sharpton, candidato a la elección presidencial en 2004.
En los alrededores del Capitolio, decenas de oradores tomaron la palabra para fustigar el racismo y la pobreza que sigue prevaleciendo en Estados Unidos, y que quedaron crudamente al descubierto por el ciclón Katrina, que afectó a finales de agosto el sur del país, especialmente Nueva Orleans.
"Protestamos porque existe todavía un abismo entre dos Estados Unidos", aseguró Jackson.
Farrakhan, principal organizador del acontecimiento, se dirigió a la multitud al final de la jornada y acusó al gobierno de "negligencia criminal" tras los desastres provocados por Katrina.
También se felicitó por la presencia de "un número sin precedentes de líderes negros que han hablado a Estados Unidos y al mundo con una sola voz".
Mediante una videoconferencia, el presidente del parlamento cubano, Ricardo Alarcón, felicitó desde La Habana a los organizadores de la manifestación y deploró que el gobierno estadounidense hubiese rechazado la ayuda de Cuba tras el paso devastador del huracán Katrina.
"En un país considerado el más rico, el más poderoso, hemos visto que hay también una gran miseria", afirmó el legislador cubano.