BUENOS AIRES.- Al menos 32 reclusos murieron durante un motín ocurrido esta madrugada en el penal de la localidad de Magdalena, situada a 120 kilómetros al sur de Buenos Aires, según una información oficial del Servicio Penitenciario.
La tragedia fue provocada por un incendio que se desencadenó tras una rebelión de unos 200 de los 700 internos de la Unidad Penitenciaria nacional número 28, donde los bomberos continúan luchando contra el fuego.
Centenares de familiares de los reclusos, agolpados frente al portal principal del penal, reclaman información sobre la identidad de las víctimas.
La madre de un recluso dijo al canal de noticias "TN" de la capital argentina que pudo entrar a la Unidad y ver "más 30 cadáveres", muchos de ellos "no muy quemados".
La mujer afirmó que la rebelión se produjo por la falta de respuesta de las autoridades a una petición de los internos de que se ampliara hoy el horario de visitas al celebrarse el día de la madre.
Otro testigo indicó que desde la calle se escucharon varios disparos de armas de fuego, mientras que una fuente de la cárcel explicó que hay varios internos están agonizando.
La rebelión comenzó a las 02.30 hora local (05.30 GMT) cuando decenas de familiares de los reclusos llegaban a Magdalena desde distintos puntos del país y comenzaban a reunirse en los alrededores del edificio carcelario.
Dos horas después de desatarse el incendio llegó al penal el subsecretario de Asuntos Penitenciarios de la provincia de Buenos Aires, Carlos Rotundo, quien fue insultado por un grupo de personas que, posteriormente, impidió la entrada a la unidad de agentes de infantería de la policía.
