NUEVA YORK.- Varias notas en poder de un fiscal federal indican que el secretario de la vicepresidencia I. Lewis Libby conoció la identidad de una agente secreta de la CIA a través de su propio jefe, el vicepresidente Dick Cheney, según informa diario "The New York Times".
El informe surge en medio de denuncias de que el gobierno divulgó la identidad de la agente de la CIA en represalia contra su esposo, un diplomático que fue a África a investigar si Saddam Hussein buscó allí materiales para fabricar armas atómicas, y que luego escribió un artículo afirmando que ello era falso y cuestionando los motivos esgrimidos por el gobierno para invadir Irak.
El diario dijo que las notas tomadas durante una conversación realizada el 12 de junio del 2003 entre Cheney y Libby parecen diferir de la versión dada por el propio Libby al prestar declaración ante un jurado investigador.
En esa versión, Libby dijo que habían sido unos periodistas los que le habían mencionado por primera vez el nombre de la agente, Valerie Plame.
El diario asegura que las fuentes no identificadas de su informe, publicado en la edición del martes, fueron abogados involucrados en el caso.
Complejo puzzle
Libby ha surgido recientemente en el centro jurídico de la investigación penal del fiscal especial Patrick Fitzgerald, debido a la conversación que sostuvo acerca de Plame con la periodista del Times Judith Miller.
Miller dijo que Libby le habló en tres ocasiones acerca de Plame y de su esposo, el diplomático Joseph Wilson, aunque no le mencionó necesariamente su nombre ni le indicó que era agente encubierta.
Las notas de Libby indican que Cheney supo que Plame trabajaba para la CIA más de un mes antes de que su identidad fuese divulgada públicamente por el columnista Robert Novak.
Las notas de Libby, según el Times, indican que Cheney obtuvo su información acerca de Plame y su esposo a través del entonces director de la CIA, George Tenet.
Las notas no contienen sugerencia alguna de que Cheney o Libby supiesen al momento de hablar acerca de Plame que ésta era una agente encubierta ni que su identidad fuese secreta, dijo el diario.
Revelar la identidad de un agente encubierto de la CIA puede ser un delito, pero sólo si la persona que lo descubre sabe que el agente está en activo y clasificado como encubierto.