Albergues se preparan con comida ante cualquier contingencia de Beta. |
'Beta' se formó en el suroeste del mar Caribe. |
BOGOTA.- La situación es grave en la isla colombiana de Providencia, azotada hace varias horas por el huracán Beta, donde hay heridos y viviendas destrozadas, informó este sábado el subdirector del estatal Instituto de Estudios Ambientales y Meteorológicos de Colombia (Ideam), Max Henríquez.
"La situación esta siendo grave porque el sistema se mantiene pleno sobre la isla con lluvias muy fuertes y vientos sostenidos de 130 km por hora (...) y está causando los efectos más serios" señaló Henríquez, quien reconoció que hace varias horas su instituto perdió contacto con la pequeña isla de 5.000 habitantes.
En la noche del viernes al sábado la tormenta tropical Beta se convirtió en el huracán número 13 de la actual temporada, a su paso por la isla colombiana que está ubicada a unos 210 km de las costas de Nicaragua.
A las 06H00 GMT el ojo del huracán se encontraba justo al noroeste de la isla de Providencia, con vientos sostenidos de hasta 120 km por hora, y fue calificado como categoría uno, el nivel más bajo en la escala de medición de huracanes Saffir-Simpson que llega hasta el 5.
Sin embargo no se descarta que se "refuerce un poco más en las próximas 24 horas", advirtió más temprano el NHC.
El experto colombiano reconoció que su dependencia perdió hace varias horas la comunicación con Providencia y dijo que en el último contacto el capitán del puerto de la isla, Germán Collazos, le relató que "todo estaba volando por los aires, que no podía salir nadie a la calle y que había algunas viviendas en el suelo y se reportaban algunas personas heridas".
El ministro de Protección Social, Diego Palacio, a quien el gobierno desplazó a la zona para que atienda la emergencia, se encuentra en la vecina isla de San Andrés esperando a que mejoren las condiciones climáticas para sobrevolar a la zona, indicaron radios locales.
El gobierno colombiano dispuso desde el jueves un plan de emergencia para atender el paso del meteoro por el archipiélago de San Andrés y Providencia, que incluyó el envío de varios aviones militares con ayuda.
