MANAGUA.- El huracán "Beta" se disipó hoy totalmente, tras su llegada a Nicaragua el domingo, pero el fenómeno origina intensas lluvias, lo que preocupa a las autoridades del país centroamericano.
El director del Sistema Nacional de Prevención, Mitigación y Atención a Desastres (Sinapred), Gerónimo Hiusto, dijo que las lluvias están causando daños en las provincias de Jinotega, Matagalpa y en el norte del Caribe Norte de Nicaragua.
"El Río Coco (fronterizo con Honduras) ya está sobre crecido en algunas áreas y se reportan inundaciones y en Waspán el número de evacuados se ha incrementado y anda por los 2.000", dijo Hiusto.
"Este es un efecto indirecto de Beta que nos tiene preocupados", enfatizó el director de Sinapred en una cita con representantes de la comunidad de países cooperantes y de organismos no gubernamentales nacionales e internacionales en el edificio de la cancillería.
Las precipitaciones continúan en sectores de la ribera del Río Coco, asentamiento natural de poblaciones indígenas, donde desde marzo pasado se declaró zona de desastre por los efectos de plagas de ratas e inundaciones causadas por diversas ondas tropicales.
En esos sectores de Waspán, San José del Bocay, Wiwilí y San Sebastián de Yalí, el número de afectados puede ser de 30.000 personas asentadas en 84 comunidades indígenas de las 120 de la región.
"Hoy más que nunca necesitamos responder a estas comunidades y no tenemos ya los recursos con que hacerlo, en momentos apremiantes porque se acerca el período de siembras para que los indígenas puedan abastecerse", dijo Hiusto.