TEL AVIV.- Alrededor de 200.000 personas se reunieron este sábado en Tel Aviv para rendir homenaje al primer ministro israelí Yitzhak Rabin, en el mismo sitio donde fue asesinado hace diez años por un judío extremista.
La cifra de asistentes fue dada a conocer por los organizadores de la reunión, que comenzó con la difusión del último discurso contra la violencia pronunciado por Rabin, apenas una hora antes de su asesinato, el 4 de noviembre de 1995.
Una inmensa banderola con la foto de Rabin y la leyenda "Diez años después de su muerte", coronaba un estrado colocado en el medio de la plaza, donde personalidades y cantantes se sucedían en una atmósfera de recogimiento.
Sobre una pantalla se proyectaron episodios de la vida de Rabin, al tiempo que se soltaban globos con los colores de Israel, blanco y azul.
